Por Rafael Camacho y Heriberto Paredes
Xayacalan, Michoacán. Luego de que el pasado sábado 8 de febrero comenzara un operativo, por parte de las autodefensas, para recuperar las tierras pertenecientes a las comunidades nahuas de la costa michoacana, el día de hoy se dio un avance sustancial que ha puesto la situación a favor de las comunidades indígenas que habitan las comunidades de Pómaro, Coire, Ostula y la encargatura de Xayacalan, poblaciones pertenecientes al municipio de Aquila.
La jornada de hoy estuvo cargada del apoyo popular de las pocas familias que aún habitan en esta golpeada región costera. Por la mañana, una asamblea realizada en Ostula y con la presencia de alrededor de 1200 personas, determinó que las guardias comunitarias y grupos de autodefensa permanecieran en esta localidad para mantener la seguridad.
Desde que este operativo comenzó, los comunitarios han procedido con cautela para lograr avanzar a las distintas poblaciones en donde, hasta hace algunas semanas, era impensable acceder debido a la fuerte presencia de los Caballeros Templarios, quienes desde hace ya más de cuatro años han atemorizado a la población a base de secuestros y asesinatos. Es en estas tierras en donde tuvo lugar una de las masacres selectivas que desapareció a todos los líderes comunitarios históricos y a algunos de sus familiares tan sólo por promover o apoyar un proyecto comunitario alejado de los partidos políticos y del cultivo de marihuana y amapola. Un proyecto que favorecía la recuperación de usos y costumbres como la guardia comunitaria, las formas de gobierno indígenas y el viraje social hacia una vida más justa y libre.
El avance de los comunitarios también ha estado acompañado de elementos de la policía federal, quienes desde hace ya varias semanas han mostrado la disposición para coordinarse con las fuerzas populares y de esta manera hacer frente al crimen organizado. No así el ejército, quien no deja de impedir que las tareas de recuperación se den con facilidad y, por el contrario, ha demostrado que de alguna manera mantiene una relación con el crimen organizado. Un ejemplo de ello es lo que hizo un comando del ejército el martes 11 de febrero en la comunidad de Ostula: varios elementos militares, que se desplazaban en vehículos de la institución, apuntaron directamente a los comunitarios con armas de grueso calibre, las llamadas Barrett, para luego ingresar a un domicilio en que se encontraban las armas de las autodefensas con las que realizaban el operativo.
Minutos más tarde de este suceso, los habitantes de la comunidad nahua de Ostula, salieron a rodear al ejército para impedir que se llevaran las armas, tal y como se muestra en el video difundido en días pasados. El apoyo popular a las autodefensas y guardias comunitarias ha sido un elemento central para la recuperación de este territorio, sin él habría sido imposible frenar al ejército para que devolviera las armas confiscadas y sin este apoyo tampoco sería posible pensar en la restauración de la tranquilidad en la zona.
Al mismo tiempo que la asamblea se desarrollaba en Ostula, varios grupos de policías ministeriales recorrieron la localidad de Xayacalan —población fundada en 2009 en tierras recuperadas como parte del proyecto político nahua– anunciando a la población que Federico González, alías Lico, ya no los apoyaría y que por lo tanto deberían de abandonar inmediatamente esta comunidad. ¿Qué hacen policías ministeriales convertidos en voceros del jefe de plaza templario, aquel que ha operado desde hace varios años para que el crimen organizado se mantenga fuerte y continúe operando? Nuevamente dejamos en claro que la colusión de varias instituciones de gobierno es una realidad y el últimatum dictado hoy a la población de Xayacalan es una muestra contundente.
Las autodefensas y guardias comunitarias así como la población de Ostula detuvo la asamblea y decidió acudir a la población de Xayacalan para detener a los ministeriales que servían de voceros delincuenciales. Nuevamente la población apoyó esta presencia y recibió a los comunitarios de manera favorable y de manera similar a como sucedió en Ostula, se acordó que se establecieran para mantener la seguridad y evitar que Lico regresara o bien hubiera represalias.
El miedo entre la población va disminuyendo poco a poco para dar paso a la recuperación del proyecto político que en 2009 tuvo su momento de mayor concreción, la presencia de los comunitarios es una situación sin precedentes que se recibió de buena manera. Cabe resaltar que estos grupos están conformados por elementos de autodefensas de municipios como Chinicuila, Coalcomán e integrantes de las guardia comunitaria de Aquila.
Escenas de alegría y fuerza social no se veían desde hace mucho tiempo en esta costa, y todo parece indicar que la toma de la costa michoacana que corresponde al municipio de Aquila es un hecho que viene a reforzar la lucha contra el crimen organizado.
A pesar de lo agitado de la jornada, varios elementos de comunitarios se pusieron en marcha con rumbo a la población conocida como La Placita, lugar en la que se concentran buena parte de los Caballeros Templarios que operaban hasta el día de hoy. Mientras esta información se difunde se están llevando a cabo las búsquedas necesarias para detener a los integrantes del cártel y al jefe de plaza, Federico González, Lico.
Es hora de que se haga justicia de tanatos asecinatos que an quedado inpune por oidos sordos del gobierno inepto.comuneros de Santa Maria de Ostula,,, sigamos el lema que nuestro Comisariado Don Francisco Manuel Nos dejo y en su memoria sigamos adelante.
amigo… Xayakalan es una encargatura no es una comunidad, dicha encargatura pertenece a la comunida de Santa María Ostula.
Tienes toda la razón, sólo usamos ese término para que los lectores se familiarizaran pero cambiaremos el término. Gracias!