Ha pasado un año ya desde que el 24 de febrero del 2013, algunos miembros de la Asociación Ganadera de Tepalcatepec, Michoacán, y pobladores de éste y del municipio de Buenavista Tomatlán, decidieron tomar las armas para liberarse del crimen organizado que no sólo los extorsionaba y les quietaban sus tierras productivas, sino que violaban y asesinaban en forma bestial a las personas (especialmente mujeres) como se hace en muchas partes de México. Un año de libertad que también se ha pagado con sangre.
José Manuel Mireles, médico del pueblo, fue uno de los habitantes de Tepalcatepec que tomaron el control de la seguridad casi desde el inicio del levantamiento. El pasado 4 de enero de este año 2014, sufrió un accidente cuando la avioneta en la que pretendía salir de La Huacana hizo un aterrizaje forzoso. Muchos pensaron que moriría y que por tanto el movimiento llegaría a su fin, no obstante él se recuperó y regresó a su comunidad para retomar las labores que desempeñaba.
El regreso del doctor Mireles a la vocería oficial del Consejo Ciudadano de Autodefensas movilizó inmediatamente a la prensa nacional e internacional que está a la expectativa de lo que sucede en Michoacán. Fueron niños quienes se dieron cuenta de que el doctor se encontraba a bordo de una camioneta mientras llegaba a su pueblo, fueron ellos quienes tomaron fotos y videos con sus teléfonos celulares. Después preguntaron al doctor si podían subirlo a las redes sociales y el contesto que sí. «Ya nos sentíamos a salvo después de haber caminado y transbordado diferentes vehículos para que no nos identificaran» nos cuenta la esposa del doctor, quien hasta el momento se ha reservado la posibilidad de dar entrevistas y su opinión sobre el proceso de las autodefensas.
Ha pasado un año desde que todo esto comenzó, muchas personas se preguntan ahora cuál será el rumbo que tomarán los grupos de autodefensa. ¿Se quedarán bajo la coordinación de la policía federal y se limitarán a realizar tareas policiales para intentar avanzar hacia otros territorios michoacanos? ¿O tal vez buscarán generar los espacios y las discusiones para que esta limpieza se haga de manera profunda y contundente a través de la reorganización política y social? ¿Habrá participación popular para evitar que el infierno de los cárteles se repita? No existen respuestas tajantes y cerradas, todavía se está en una etapa en transición, de equilibrio de fuerzas al interior de las autodefensas, de rencillas pasadas y de definiciones.
Sin embargo existe el elemento del Estado y la relación de las autodefensas con el gobierno federal y estatal, con los cuerpos de policía y con el ejército. Desde una modesta perspectiva, construida a través de este viaje largo y diverso en opiniones y posturas, es precisamente esta relación la que va a disminuir la capacidad de toma de decisiones por parte de las autodefensas. Más claro: la estrategia del gobierno es reducir a los comunitarios al nivel de lo que por definición son los grupos de defensas rurales, es decir, una sección menor sin muchas velas en este entierro. Si no pudo lograrlo a través de las difamaciones y detenciones (como los comunitarios del municipio de Aquila) y tampoco lo logró con la firma de un pacto efímero y sin sustento, ahora lo hará selectivamente. Uno por uno, cada líder de las autodefensas están en la mira, no importa si se alían o no con el gobierno, si se llevan bien entre sí o se pelean, para él nadie puede ser más poderoso que los representantes del Estado, salvo que se trate de dobles militantes y que sean parte del gobierno y del crimen organizado simultáneamente.
Ya ha ocurrido la detención de Hipólito Mora por el asesinato de Rafael Sánchez Moreno, El Pollo, y su chofer José Luis Torres Castañeda, así como algunos movimientos turbios que lo enfrentan con otro líder, Simón El Americano. Tal y como afirmó el doctor Mireles en un comunicado difundido en días anteriores, «las autodefensas no se pueden dedicar a atender diferencias personales, su labor es limpiar el estado de Michoacán de criminales y también a exigir al gobierno que cumpla lo acordado en todo este tiempo, incluyendo la aplicación de justicia pronta y expedita». El vocero oficial también aclaró que al interior de las autodefensas la unidad no sólo existe sino que es una necesidad imperante para avanzar en sus objetivos.
Poco a poco las cosas van quedando más claras para la población, para mucha gente es necesario que las autodefensas miren al pueblo y opten por un camino distinto al que los templarios impusieron con fuego y miedo. Si bien es importante hacer las depuraciones necesarias para que la confianza de la gente no se pierda, no resulta conveniente entrar en el juego de desprestigios y divisiones en que puede meterles el gobierno federal. Ya en otros movimientos ha aplicado estos mecanismos de reducción y desafortunadamente lo ha logrado. Hipólito Mora que abogaba por los presos de Aquila y afirmaba que ya lo había negociado con el comisionado Alfredo Castillo pasó, de pronto, a ser el detenido e inculpado. No es casualidad.
Entrevistas: las autodefensas en su primer aniversario
El doctor, en su regreso a Tepeque, estaba agotado por el viaje y afuera de su casa ya había gente de la prensa esperando la noticia del día. Fue ahí donde nos enteramos que asistiría a la fiesta de aniversario. Con anticipación habíamos decidido hacer un recorrido durante una semana para hacer un balance de la situación actual en las principales comunidades liberadas. Tuvimos la oportunidad de entrevistar a la gente común y a varios de los representantes de los grupos de autodefensas. Entrevistar a los principales líderes de este movimiento fue fundamental para tener una postura sobre los diferentes el manejo de la información en los medios comerciales e independientes, decidimos también hacer una entrevista con Luis Antonio Torres González, El Americano o Simón, como lo conocen en Buenavista Tomatlán, y otra con Hipólito Mora, con quien había diferencias personales.
El Americano
Con una mirada seria, una cerveza light en la mano y una pistola corta en el cinturón —semi cubierta por su camisa y una pequeña bolsa en bandolera— comienza a contarnos cómo se involucró en el movimiento de las autodefensas, su posición actual sobre las intenciones del gobierno y lo que se visualiza a mediano plazo para sus comunidades. También nos da su posición sobre la recién detención del Chapo Guzmán, uno de los narcotraficantes más poderosos de México.
Simón sabe que es un referente que inspira respeto y cierta autoridad en las comunidades donde tiene influencia en este proceso de liberación del crimen organizado. Sostiene que el movimiento ha pasado por varias situaciones y no considera que haya rupturas ni divisiones con los demás líderes, pero que sí hay ciertas diferencias, como el acuerdo que se estableció con el gobierno, sobre el registro de las armas impuesto a los miembros de las autodefensas. Considera que no tienen tiempo para esperar a que el gobierno se dedique atacar al crimen organizado. «El gobierno está haciendo un acuerdo donde quiere que nos registremos como policías rurales, pero nadie va ha estar al mando del gobierno, nosotros no vamos a esperar a que nos sigan matando gente», afirma. Éste no es un movimiento único, sino que hay varias vertientes que se han dado en un lapso de un año. Según él, hay algunos voceros que no están tomando en cuenta al pueblo, «ellos están haciendo muchos acuerdos con el gobierno, es como política, sin tomar en cuenta al pueblo. Y el gobierno está corrompido».
No obstante, Simón se muestra confiando en que con el entonces esperado regreso de Mireles: «Cuando el Doctor llegue va haber un cambio enorme, porque el ha estado al tanto del pueblo y no de la política, ni de gobernadores. Cuando el regrese va aclarar muchas cosas que se han dicho». El Americano considera que cualquiera puede ser vocero del pueblo, pero sino se toma en cuenta al pueblo, este mismo lo puede destituir.
En las diversas barricadas se ha reducido la imagen de un pueblo armado hasta los dientes, pero mantienen sus armas listas para cualquier situación inesperada, cargan armas cortas en pequeños bolsos o en la cintura, también en sus camionetas. La gente del pueblo dice estar lista para avanzar y liberar más municipios. También hay gente que se preocupa por sus hijos, pues han crecido en un contexto de guerra: han aprendido sobre los diferentes calibres de las armas, han escuchado sobre asesinatos y otras atrocidades, costos de la guerra que aun no se sabe como se pagarán.
Mientras tanto, la gente ya sale a trabajar o a hacer su compras con mayor confianza, los niños juegan en las calles. Los miembros del Consejo Ciudadano del pueblo de Buenavista Tomatlán se han reunido más de una vez para platicar qué es lo que sigue después de la limpieza de la delincuencia organizada. Por el momento ven como una necesidad el crear no sólo grupos de autodefensa, sino grupos de civiles que puedan recorrer calle por calle para consolidar colonias organizadas, en la cual cada uno tenga su representante y así poder dar otro rumbo a la situación violenta, aunque también crear mejores condiciones de vida para el pueblo.
Si ellos se unen y hacen sus grupos de ciudadanos se pueden exigir las peticiones del pueblo —asegura El Americano al mismo tiempo que comenta sobre la detención de uno de los capos mas buscados de México y de Estado Unidos: «Necesitamos saber como es que a él, el Chapo Guzmán, si lo pudieron aprender, porque es mucho más importante que El Chayo [Nazario Moreno] y La Tuta [Servando Gómez] —líderes del grupo criminal de Los Caballeros Templarios— y a ellos no los han podido capturar, es como para taparle la boca a los medios de comunicación».
Un par de semanas después, el 9 de marzo, cayó abatido la principal figura templaria: Nazario Moreno, también conocido como El más loco. Luego de un riguroso trabajo de inteligencia por parte de los grupos especiales de las autodefensas, quienes neutralizaron al capo en las serranías de Tumbiscatío, la marina no tuvo más que cosechar los frutos del trabajo de los civiles. Su cuerpo fue velado en una lujosa casa funeraria de Morelia, en compañía de familiares cercanos. No hubo militares ni policía custodiando el lugar.
Hipólito Mora
Hipólito cuida las palabras que utiliza, se siente seguro de sí mismo y del grupo que lo acompaña, quienes escuchan atentamente las preguntas que le hacemos. Se le nota animado por el festejo de un año del levantamiento y de la toma de una pequeña capilla donde los Caballeros Templarios pretendían colocar el busto de su principal jefe. «A un año de habernos levantado estamos libres, estamos trabajando sin muertes y creo que la Ruana es un pueblo más tranquilo», asegura, al mismo tiempo que niega la ruptura del movimiento anunciada en los medios. El dirigente considera que en cualquier parte existen diferencias. Sin embargo, menciona la necesidad de «limpiar» algunos grupos de autodefensas, con el apoyo de los ciudadanos y del gobierno. «Para que se logre esta limpia, el gobierno necesita que lo apoyemos, porque nosotros conocemos a los criminales en cada pueblo». Asimismo, Hipólito considera que lo que están tratando de hacer «es aprovechar los apoyos que esta ofreciendo el gobierno para reactivar la economía, el sueño que tenemos ahora, es generar fuentes de empleo».
En las diferentes entrevistas realizadas durante el recorrido, la gente común comparte el sentir de que en el gobierno y en los partidos políticos se encuentra incrustado el crimen organizado, no obstante, a Hipólito le parce importante la presencia del gobierno. Ya está el gobierno aquí, las fuerzas estatales y federales, pero no vinieron por su gusto, vinieron por el apretón que les dimos con las armas. El gobierno sabe hacer su trabajo, pero con la presión que le hemos dado lo está haciendo un poco mejor —afirma. Para el dirigente, el Estado siempre ha estado infiltrado por la delincuencia organizada, pero ahora —supone— están dispuestos a vigilar a los funcionarios para que hagan bien su trabajo o sean destituidos. Le preguntamos si aceptaría en algún momento el ofrecimiento de un cargo de gobierno a él o alguno de los miembros de las autodefensas a lo cual contestó: «lo aceptaría solamente si fuera para el bien de los ciudadanos, pero para beneficio mío ¡no!». Finalmente, aseguró que hay mucha gente que lo quiere ver muerto a él y a la mayoría de los representantes de las autodefensas y dijo estar dispuesto a morir por esta causa.
Luego de que el pasado 11 de marzo, fuera sorpresivamente detenido, el día de ayer, 19 de marzo, el Juez Cuarto de lo Penal le dictó auto de formal prisión al considerarse que habían elementos suficientes para demostrar su culpabilidad. Según su abogado, Eduardo Quintero Madrigal, este hecho implica su traslado al Centro de Rehabilitación Social de Apatzingán, lugar en donde tiene muchos enemigos que podrían atentar contra su vida. Tal es el destino de un hombre que sembró sus esperanzas en el gobierno.
Mireles, el médico del pueblo
Desde las primeras horas del 24 de febrero, hubo gran movimiento en la Ruana y Tepalcatepec por los preparativos del festejo, que incluyó, desde luego, Mariachis, birria y cerveza. Las mujeres y los niños portaron sus camisetas con la leyenda «Autodefensa. Por un Tepalcatepec Libre». Con orgullo desfilaron cientos de personas portando pancartas de repudio al alcalde municipal Guillermo Valencia, acusado de haberse reunido el 23 de febrero con líderes de los Caballeros Templarios. Bajo el sol intenso, los niños con la banda de guerra marcaban el ritmo del desfile, había mucha gente aplaudiendo en las banquetas, en los negocios y desde las ventanas.
A la mitad del recorrido, el doctor Mireles hizo acto de presencia. Parte de la prensa estaba distraída y los que estaban cerca de él se abalanzaron sin pensarlo dos veces. Respondió a algunas preguntas sobre cómo era Tepalcatepec hace un año. «Era un infierno, era un pueblo fantasma, no se podía caminar y mucho menos desfilar. Este año representa un gran logro porque nos habían dado 24 horas de vida como movimiento y aquí estamos».
El doctor contó sus anécdotas sobre como intentaron limpiar Apatzingán con 3000 autodefensas, pero aparecieron 8,000. Después decidieron no dar una cifra cerrada de cuántos formaban parte de esta iniciativa, pues cada día se sumaba más gente en los diferentes frentes. En la noche, antes de iniciar la música, reconoció la principal arma de las autodefensas, «las únicas armas que hicieron posible este levantamiento contra el crimen organizado y la mejor arma que tienen las autodefensas es el pueblo». Ha sido un año sin pagar derecho de piso y sin pagar cuota.
Mireles nos dio una entrevista al día siguiente, habló de diferentes temas, entre ellos de la relación con los demás lideres, donde sostuvo que no había fracturas y que por el contrario, los consejeros habían ratificado su posición como vocero general del Concejo; aunque al mismo tiempo, estaban buscando impulsar un vocero por cada municipio. También se refirió a las notas que circulaban acerca de posibles infiltraciones en las filas de las autodefensas por miembros de los Caballeros Templarios y por otros cárteles.
Tenemos que respetar la autonomía de cada pueblo que ya se levantó en armas y la autonomía de sus coordinadores, porque desde el punto de vista de los infiltrados, si algún municipio tiene criminales en sus filas, el único responsable es el coordinador general de ese municipio. Porque algo que no me gusta es que nos involucren con otros cárteles.
El dirigente habló de los espacios del poder económico y político que están dejando los Caballeros Templarios, quienes incluso determinaban quién iba a gobernar. Afirmó que están atentos para que no se contaminen estos vacíos de poder y se refirió a los partidos políticos: «no podemos dejar el futuro de nuestra nación a ningún partido político. Reclamamos la limpieza de los diferentes niveles de gobierno, porque así como Michoacán hay muchos estados colombianizados».
Por otra parte, el médico que SubVersiones entrevistó hace un año, sostiene que seguirán avanzando hacia otros municipios, pues considera que es un derecho que determina la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos: «el artículo 10 dice que todo ciudadano tiene derecho a portar un arma para su legítima defensa y no especifica de qué calibre, así que somos grupos de autodefensa y el artículo 39 se refiere a que la soberanía reside en el pueblo y este es el que manda». La figura del doctor se ha vuelto crucial porque permite pensar en una unidad a partir del consenso y de colocar todos los esfuerzos en continuar con el movimiento, no en mantener los enredos a los que se somete a algunos líderes de las autodefensas. Su figura alta y delgada da confianza en las reuniones a las que asiste y su voz no tiembla cuando habla por la radio con Carmen Aristegui, pero sobre todo se ha ganado esta confianza porque es una persona real, que vive en su pueblo sin lujos y sin ambigüedades.
Un día después de esta entrevista los grupos de autodefensa avanzaron por los cuatro puntos cardinales de Michoacán: tomaron los municipios de Santa Clara del Cobre, Opopeo y Zirahuén, con el objetivo de avanzar hacia Morelia. Ante esta situación, el gobierno ordenó instalar retenes de la policía federal para no permitirles el paso. Por su lado, los concejos ciudadanos y populares, junto con los grupos de autodefensas, se siguen reuniendo de manera más sistemática para lograr una mejor coordinación y avanzar en la consecución de objetivos tan importantes como la reconstrucción del tejido social a partir de la participación de la gente que habita los territorios liberados hasta ahora.