La imposición de mega-proyectos que benefician ampliamente a grupos empresariales en la entidad es una práctica cotidiana de los gobiernos mexiquenses y síntoma del legado priista que se mantiene inamovible. Algunos de los casos más recientes de despojo que han causado gran controversia a nivel nacional e internacional, debido a las graves violaciones a los derechos humanos en las que incurrieron autoridades, son los casos del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México y la Autopista Toluca-Naucalpan.
En el Estado de México, durante el período del 2012 al primer trimestre de enero del 2015, 150 activistas fueron víctimas de amenazas, agresiones físicas, malos tratos, tortura y desapariciones. Esto fue denunciado por organizaciones de la sociedad civil y defensoras de derechos humanos, quienes mencionaron que uno de los actos más recurrentes es el despojo de tierras a pueblos indígenas, ya que mediante engaños, son invadidos sus territorios y entregados a empresas constructoras.
Las redes de corrupción son difíciles de desentrañar y en ellas participan funcionarios de alto nivel político. En el caso en el que vamos a profundizar en esta ocasión, incluso la presidencia de la República está involucrada, así como el gobierno del estado de México y dependencias federales dedicadas a la conservación de áreas naturales. Este no es un caso aislado ni único, pero ejemplifica perfectamente el modus operandi de estas redes de corrupción que, a lo largo de décadas, han desarrollado una compleja maquinaria de Ingeniería de conflictos.
Algunas huellas de estas redes de corrupción no se han podido ocultar, a partir de ellas podemos vislumbrar algunos de los negocios que se prospectan y como desde el poder político se tejen las redes necesarias para implementarlos. El ostentoso enriquecimiento de los gobernadores en entidad, por ejemplo; Alfredo del Mazo González, la casa blanca de Enrique Peña Nieto, el enriquecimiento ilícito de Arturo Montiel Rojas, el legado de inseguridad, pobreza y corrupción de Eruviel Ávila Villegas o el gran sueldo con el que inicio el actual gobernador Alfredo del Mazo Maza.
Esta red de políticos y empresarios tiene estructurada su forma de imponer proyectos y sofocar resistencias para incrementar sus multimillonarias ganancias, en la mayoría de los casos utilizando la represión violenta a través de las fuerzas de seguridad pública. La justificación publica de estos negocios, siempre son en nombre del progreso social, aunque diversas organizaciones de la sociedad civil han demostrado que en realidad dichas obras, deterioran gravemente el medio ambiente.
Estrategias para desarticular el movimiento en defensa del volcán Xinantecatl (Nevado de Toluca).
Santiago Tlacotepec es una comunidad indígena de origen Matlatzinca ubicada en a las faldas del Nevado de Toluca, que desde 2013 mantiene una lucha contra la Recategorización del Parque Nacional Nevado de Toluca. Este poblado tiene una larga tradición de defensa del territorio, desde épocas prehispánicas, pasando por la guerra de independencia y la revolución Mexicana.
En esta ocasión l@s integrantes del Comité en Defensa del Parque Nacional Nevado de Toluca nos platican, ahondando con más profundidad en las estrategias gubernamentales que se han implementado para intentar desarticular su movimiento y realizar una privatización paulatina de sus recursos naturales, con miras a concretar los megaproyectos que se pretenden imponer en el Volcán Xinantecatl.
A través de sus testimonios nos desglosan la silenciosa pero compleja estrategia que se despliega en su territorio para neutralizar la organización comunitaria, realizar una privatización paulatina, fragmentar el tejido social y legitimar jurídicamente el despojo. Entrevistamos a pobladores que defienden su territorio, que están atentos a los cambios que se dan en su comunidad, y quienes desde su perspectiva plantean como se está apuntalando el proceso de despojo que afecta directamente las tierras que heredaron de sus antepasados.
No solo se trata de la tierra -dicen- ahí están también sus costumbres, tradiciones, creencias y forma de vida, tampoco se trata solo de pensar en ellas y ellos, aseguran que todo lo que amenace al volcán atenta contra el pueblo mexicano. De estos imprescindibles testimonios podemos destacar que por lo menos en el periodo posterior a 2013, los defensores del territorio han detectado las siguientes estrategias:
- Fragmentación de la organización comunitaria del territorio. Por un lado existe un cambio inter-generacional, donde los viejos abuelos acostumbrados a la asamblea, las faenas y la organización comunitaria, están muriendo. Y existe un desfase en la transmisión de los saberes, debido al sistema de educación pro-capitalista, que se ha impuesto en todo el país. Por otro lado, están avanzando las estrategias que fragmentan la organización, el caso que pudimos testificar, por ejemplo, es la invasión de inmobiliario urbana en la plaza principal. Este inmobiliario que visitamos no cumple ninguna función ni siquiera básica, no da sombra, nadie se puede sentar, no hace absolutamente nada, pero dificulta poder realizar reuniones amplias en la plaza central del pueblo, como es costumbre de los pueblos originarios.
- Privilegios del Estado a los intereses empresariales. Nos cuentan con detalle cómo las empresas multinacionales de semillas transgénicas, logran penetrar a las comunidades a través de programas gubernamentales de asesoría técnica. Así introducen gradualmente sus semillas genéticamente modificadas e inicia un proceso de deterioro de la tierra y la dependencia de los campesinos a estos productos y sus derivados como fertilizantes o pesticidas. El caso de los grupos empresariales inmobiliarios -nos dicen- tiene sus propias características, ya que través de “presta nombres” han incrementado drásticamente la adquisición de terrenos.
- Desarticulación de las instituciones comunitarias. En Tlacotepec directamente se atacó al comité autónomo del agua potable, institución del pueblo que se organiza en elección por usos y costumbres, que toma decisiones a partir de asambleas generales y que no depende el Estado. Desde el 2014 se trató de imponer a un comité que no tenía representatividad por usos y costumbres. Posteriormente en 2016 al ser elegido un nuevo comité de forma tradicional por la población, se le despojo de sus oficinas. Hasta este momento se mantiene un conflicto legal entre el ex delegado municipal de Toluca y el comité autónomo del agua potable. Mientras se mantenga este conflicto, no existe una representación comunitaria que atienda a plenitud, todos los asuntos relacionados con el agua de la comunidad y esto sumado a las irregularidades ya mencionadas, deja en un panorama de zozobra a los pobladores.
- La privatización paulatina del agua. Grandes zonas residenciales, ranchos, clubs deportivos y el sector inmobiliario están demandando cada vez más agua de la comunidad, en ocasiones, obteniéndola a través de presta nombres para poder obtener el aprovechamiento, lo cual implica también el incremento de prácticas de corrupción al interior de la comunidad.
- Deterioro del tejido social. Los partidos políticos, funcionarios y empresarios ofrecen cantidades de dinero, difíciles de obtener para las familias campesinas, y estas prácticas de corrupción generan una conducta, que se va expandiendo entre los pobladores más vulnerables para ceder su agua o sus tierras. Así también se debilita ante la población la imagen y la calidad moral que por siglos habían mantenido las autoridades comunitarias, ya que necesariamente tienen que ser cómplices de estas prácticas, para que se concreten. Los integrantes de los partidos políticos acostumbran a los pobladores a no realizar actividades comunitarias si no existe un beneficio económico, llegando incluso a la confrontación entre familias para obtener más votos y al mismo tiempo neutralizan la participación política de quienes no buscan puestos públicos y mantienen prácticas éticas.
- Imposición mediática del Estado. El Comité en Defensa del Parque Nacional Nevado de Toluca afirma que se prospectan grandes mega proyectos turísticos como campos de golf, exclusivos resorts, pistas de esquí, deportes en nieve y restaurantes de lujo. Para lograrlo –comentan- el primer paso fue la recategorización, para dejar desprotegida legalmente esta área. Y ahora el Estado se presenta como un ente poderoso y protector, haciendo uso de universidades, medios de comunicación, especialistas, instituciones locales, estatales y federales, ostentando un supuesto “manejo sustentable” de los recursos. Y al mismo tiempo deja ver a los pueblos originarios no solo como ignorantes, sino que gradualmente los está tratando en los medios como un riesgo para esta área natural.
El Nevado de Toluca: bastos recursos naturales para los negocios del grupo Atlacomulco.
El mítico grupo Atlacomulco sellado por lazos familiares, de negocios y de amistad, se sitúa como uno de los más poderos del país, con un indiscutible poder político y empresarial. No lograron entregar el gobierno de la República a otro presidente priista, pero no se les ve preocupados por ello. Quizás porque su feudo en el Estado de México permanece intocable y los negocios nacionales e internacionales que tienen prospectados se afianzaron después de su paso por la presidencia.
El presidente Lázaro Cárdenas del Rio reconoció legalmente la vital importancia de preservar incondicionalmente los recursos naturales del volcán Nevado de Toluca y por ello en 1936 lo declaro Parque Nacional. Para la administración de Enrique Peña Nieto, esto no era necesario y decidió bajar la categoría de esta ANP, hecho que abrió las puertas a las empresas que pretenden tener acceso a la explotación de las 29,333.492537 hectáreas de inmensos recursos naturales que representa el otrora Parque Nacional Nevado de Toluca, recategorizado a Zona de Protección de Flora y Fauna.
De acuerdo al Resumen del Programa de Manejo del Área Natural Protegida con categoría de Área de Protección de Flora y Fauna Nevado de Toluca, las zonas destinadas para aprovechamiento (explotación) son:
- Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Naturales Áreas Forestales. Esta Subzona comprende una superficie de 17,785.484040 hectáreas repartidas en once polígonos.
- Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Ecosistemas: Áreas Agropecuarias A. Esta Subzona comprende una superficie de 9,955.831088 hectáreas comprendidas en 10 polígonos.
- Subzona de Aprovechamiento Sustentable de los Ecosistemas: Áreas Agropecuarias B. Esta Subzona comprende una superficie de 1,204.060239 hectáreas comprendidas en 14 polígonos.
- Subzona de Uso Público Áreas de Turismo Sustentable. Comprende una superficie de 388.117170 hectáreas, divididas en ocho polígonos.
Así los recursos maderables, hídricos, bióticos, escénicos, genéticos, de flora, fauna, agricultura, silvicultura, investigación, históricos, antropológicos, turísticos y minerales, podrán ser explotados por aquellas elites que logren contar con los contactos y recursos necesarios para beneficiarse de este lucrativo negocio. Se habla de una explotación sustentable, porque las empresas interesadas tendrán que librar todos los requisitos y tiempos que las dependencias ambientales han determinado para certificar que sus actividades no impactaran excesivamente a una Área Natural Protegida.
Sin embargo, esto no suena ni siquiera como una dificultad para empresas que dentro de sus mesas directivas cuentan con integrantes de apellidos Montiel, Colín, Peña, Del Mazo, Fabela, Hank, Nieto, Hinojosa Cantú, San Román, Etc. Ya que este selecto grupo de políticos y empresarios de Atlacomulco cuentan con Alfredo del Mazo Maza, gobernador del Estado de México, Alejandro del Mazo Maza Comisionado nacional de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas CONANP y Enrique Peña Nieto primo de ambos funcionarios, quien logro realizar los amarres políticos necesarios antes de dejar su cargo.