Por Ninx Salvaje y Regina López
Fotografías por Regina López
Desde la semana pasada, han salido varias notas en distintos periódicos anunciando la firma del mando único policial por parte del municipio autónomo de Cherán, Michoacán. Los comuneros y las comuneras del pueblo pur’épecha rechazan la noticia y reafirman su determinación de seguir luchando por su autonomía. Aclara un comunero:
Esas personas que trabajan para el mal gobierno, esa prensa que quiere desestabilizarnos porque es su estrategia de ellos, siempre saca mentira, quiere anunciar cosas que no son, quiere anunciar que Cherán ya se unió al mando único y nosotros no nos hemos unido.
No es la primera vez que la prensa comercial actúa de esta forma con Cherán. A lo largo de los últimos años, la publicación y difusión de mentiras dirigidas a perturbar a la comunidad se ha vuelto casi sistemática.
El año pasado por ejemplo, en el marco de la elecciones que se han dado en el país, salieron muchas notas anunciando la instalación de casillas en la comunidad autónoma, a pesar de su firme oposición al proceso electoral. Cabe precisar que en realidad, ninguna casilla ha podido siquiera entrar a la comunidad.
Al igual que gran parte de la población, los comuneros y las comuneras de Cherán ya han perdido todo tipo de confianza en los medios masivos. Saben bien que su meta no es apoyar al pueblo sino desinformarlo y servir a los intereses del mal gobierno.
Pierden credibilidad esos medios que no tienen fundamento. Siempre lo han hecho, quieren desestabilizarnos pero nosotros no les hacemos caso, nosotros tenemos nuestros propios compañeros que sacan lo que es verdad.
Además de que la comunidad no cree en la prensa comercial, tampoco le tiene ninguna confianza a las fuerzas armadas del estado. Hasta el 15 de abril de 2011, que el pueblo se levantó en armas para defender sus bosques del crimen organizado que los estaba destruyendo, no había recibido ningún apoyo por parte de las fuerzas oficiales. Ni la policía municipal, ni la estatal, ni la federal, ni el ejército, habían hecho caso a las llamadas de la comunidad. Peor aún, las y los comuneros del pueblo bien aprendieron que las distintas escalas de policía —no nada más la municipal— trabajan de la mano con los criminales.
En el marco de su levantamiento, la comunidad no sólo expulsó a los delincuentes sino también a la policía, para regresar a su sistema tradicional de seguridad: la Ronda Comunitaria, ahora compuesta por alrededor de cien personas de los distintos barrios. Desde esa fecha, Cherán ha vivido una extraordinaria disminución del número de delitos cometidos en su territorio, así como la ausencia total de hostigamientos, extorsiones, despariciones y asesinatos. ¿Cómo van a querer entonces que vuelvan a entrar las fuerzas policiacas y militares del Estado a su pueblo?
De todas formas, para ellos y ellas la entrada a la comunidad pur’épecha de las fuerzas armadas representa un intento más de conquista ya que antes de la colonización y luego de la «independencia» de la república mexicana, el pueblo ya tenía sus propias formas de mantener su seguridad. Nos explica el comunero:
No nos podemos unir al mando único, al ejercito, a la marina o como se llamen porque esos tienen muy pocos años. La ronda es primero que el ejército mexicano, es primero que la marina, entonces tiene más trascendencia, tiene más naturalidad. Es algo más de antes, es propio de aquí. La comunidad siempre se ha cuidado entre si, nos hemos cuidado entre nosotros mismos.
Ante la amenaza que representa el hostigamiento del gobierno para imponer el mando único, pero también en respuesta a algunos inusuales asaltos que han sufrido los habitantes del pueblo a lo largo de las últimas semanas, y a la decisión del gobierno estatal de otorgar ocho permisos para poner expendios de alcohol, la comunidad ha decidido retomar su «rondin» comunitario. Además de los cien integrantes de la ronda que siguen activos, voluntarias y voluntarios se están reuniendo para recorrer los diferentes barrios e impedir que se sigan cometiendo delitos durante la noche. Precisa nuestro compañero:
Los de la Ronda simplemente son representantes porque aquí toda la comunidad, los cuatro barrios, nos cuidamos como decíamos al principio «cuadra con cuadra, fogata con fogata». Nosotros desde aquí los 20000 comuneros nos estamos cuidando.
Y los habitantes de la comunidad no son los únicos que forman parte de esa ronda. La conforman todas las personas que, de cerca o de lejos, participan del cuidado de la comunidad.
Los hermanos que están fuera de la comunidad —los comuneros que han migrado al Norte— también nos preguntan a cada rato «qué está pasando con Cherán?». Entonces ellos también son parte de la ronda, así como los medios libres o los colectivos que vienen y nos están preguntando. Ellos también están al pendiente y nos cuidan desde fuera.
Así que si el gobierno quiere que nos unamos al mando único tiene que unir a todos y somos un chingo! Y tiene que consultar a todos y no nada más al puro concejo o a la ronda. El concejo mayor nos representa pero aquí en la estructura la máxima autoridad es la asamblea y la asamblea somos todos.
A pesar de todos los ataques, la comunidad sigue firme. «Cherán no va a bajar los brazos, nuestra forma de gobierno, nuestra autodeterminación no la vamos a soltar», concluye.