Este 10 de mayo, se cumplió un año de la sentencia por genocidio contra al general retirado Efrain Ríos Montt, quien instauró un gobierno militar y dirigió al país centroamericano durante los peores años de la guerra civil. De las 200 000 personas que fueron asesinadas durante la década de los ochenta, se estima el 83% eran mayas y que el ejército utilizó la violencia con la intención y propósito de destruirlos a través de actos de crueldad indescriptibles.
Los ixiles, en particular las mujeres, al haber sufrido directamente la violencia y el racismo de Estado, fueron una pieza clave en el desarrollo del juicio contra Ríos Montt, aportando pruebas y ofreciendo sus propios testimonios. De alguna manera, este pueblo maya de la montaña puso los cimientos para que la reparación y la justicia sean un camino duradero en el país centroamericano.
Ahora mismo, a pesar de la libertad que ha conseguido este criminal de lesa humanidad en un país donde reina la impunidad, los ixiles –en voz de Diego Santiago, miembro de la alcaldía indígena ixil– consideran «es un problema del Estado, es un problema de ellos, para nosotros los ixiles la sentencia esta dada, no se puede burlar la memoria de las víctimas».
____
Esta publicación forma parte del proceso de documentación realizado por la Caravana Climática, una gira de acción por América Latina que busca recolectar historias de pueblos que luchan en defensa de la tierra y por justicia climática mientras se dirige hacia la vigésima Conferencia de las Partes de la ONU a realizarse en diciembre en Lima, Perú.