Con fotografías de Amaranta Marentes Orozco, Estrella Pedroza y Nora Hinojo
Ángel de la Independencia tomado.
Prensa, ¡no disparen!
Por Claudia Loredo
#PrensaNoDisparen es una campaña organizada por el colectivo del mismo nombre, con el fin de difundir los actos de violencia que se realizan en contra de los periodistas mexicanos. Las agresiones contra quienes ejercen el periodismo en este país son el pan diario en la vida profesional –ya sea que trabajen en medios convencionales, independientes o como freelance–. Son actos que cada día están más y más institucionalizados y son perpetrados no solamente por el crimen organizado o poderes fácticos, sino por miembros de gobiernos municipales, estatales y federal.
Por ello, ante la impotencia para seguir ejerciendo la libertad de prensa en un país que se jacta de ser democrático, periodistas independientes, de medios nacionales e internacionales y miembros de organizaciones no gubernamentales, se dieron cita ayer domingo 23 de febrero, a las 12 horas en el Ángel de la Independencia en la Ciudad de México, con el objetivo de hacer visibles las recientes desapariciones forzadas y asesinatos que ha sufrido este gremio. Actos similares se realizaron en numerosas ciudades de la República Mexicana, como Cuernavaca, Morelos; Guadalajara, Jalisco; Xalapa, Veracruz y Coatzacoalcos, en Veracruz; Morelia, Michoacán; Villa Hermosa, Tabasco; Juchitán, Oaxaca; Mérida, Yucatán; Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; Campeche, Campeche; Querétaro, Querétaro; Guanajuato y León, en Guanajuato; Reynosa, Tamaulipas; Monterrey, Nuevo León; Chihuahua, Chihuahua; Hermosillo, Sonora; Mexicali, Baja California; Culiacán, Sinaloa. En todas se denunciaron agresiones, acoso constante y hostigamiento por ejercer el trabajo periodístico.
La libertad de expresión no solamente es necesaria para quienes ejercen el periodismo o para quienes asiduamente escuchan, ven o leen las noticias; es necesaria para cualquier intento de fortalecer las instituciones públicas y para cualquier gobierno que se proclame como liberal y democrático. Por lo anterior y con perspectiva de luchar por la libertad, justicia y democracia, el colectivo #Prensanodisparen impulsa esta campaña con la intención de que también la ciudadanía salga en defensa del derecho a informar y ser informados.
Morelos por Goyo
Por Estrella Pedroza
Con el lema “Prensa, ¡no disparen!”, reporteros y ciudadanos de Morelos salieron a las calles para exigir un alto a la violencia en contra de periodistas y respeto al derecho a la información. Además, denunciaron graves amenazas e intimidaciones a reporteras del municipio de Amacuzac, por parte de simpatizantes del diputado del Partido del Trabajo, Alfonso Miranda.
Marcha en Cuernavaca, Morelos
A las doce del día partió el contingente de la iglesia del Calvario, que se sumó a la protesta nacional convocada por el Colectivo ¡Presa no Disparen! para exigir el esclarecimiento del homicidio Gregorio Jiménez, periodista veracruzano. Así mismo un alto a la violencia, agresiones e intimidaciones de los trabajadores de los medios de comunicación de todo el país , principalmente en Veracruz.
Con mantas y carteles en mano en las que se podría leer: “PrensaNoDisparen”, “FrenteASusBalasNuestrasPalabras” y “MorelosporGoyo” , caminaron rumbo a la plaza Emiliano Zapata. En el trayecto se escucharon consignas como “No nos callaremos, No nos callaremos”, Prensa No Disparen” . “No es personal, es denuncia nacional” y “Todos somos Goyo”.
Fue una marcha distinta. Ahora quienes, normalmente, captan la imagen y toman nota, gritaron y exigieron a “los gobernantes en turno, autoridades, policías, miembros del crimen organizado, empresarios o los poderes fácticos”, respeto no sólo a su labor periodística, sino también al derecho de la ciudadanía a estar informada.
Al paso del contingente de periodistas y ciudadanos algunas personas miraban con asombro. Otras de una manera u otra daban muestras de solidaridad. No faltaron las personas que soltaron un aplauso y otras más que se acercaban a expresar su respaldo y respeto para la labor periodística.
Frente a sus balas, nuestras palabras
“Los ciudadanos se preguntan ¿qué hacen los periodistas tomando las calles? ¿Por qué se concentran en el Ángel de la Independencia, en esta plaza y en una veintena de ciudades del país? […] Pues hoy no vinimos a cubrir una manifestación, hoy vinimos a manifestarnos. Y sabemos que algo está podrido en una sociedad donde quienes deben dar la noticia se convierten en la noticia”, expresó Claudia Marino, presidenta de la Asociación de Periodistas de la Región Sur y Morelos (APRESMOR), al dar lectura a un pronunciamiento frente a la Casa de Morelos.
Reprochó la situación que el gremio periodístico vive en Veracruz, “Con Gregorio, el gobierno de Javier Duarte se sacó un diez. Completó diez periodistas asesinados en Veracruz desde diciembre de 2010, cuando asumió la gubernatura, y cuatro desaparecidos. A la suma nefasta agregamos decenas de reporteros que han tenido que salir huyendo de ese estado para salvar su vida y hoy se buscan la vida como pueden en otras ciudades de México o en el extranjero”. Pero Veracruz no es caso aislado. «Entre julio de 2000 a febrero de 2014, 87 trabajadores de la comunicación fueron asesinados en el país y otros 20 están desaparecidos». destacó.
En Morelos se agudiza la represión contra la prensa
En el marco de la movilización nacional, la periodista denunció que en la entidad “las intimidaciones van de menos a más en lo que va de esta administración. Primero policías intimidando al compañero David Monrroy para impedir que documentara un operativo el 2 de Octubre. Después agresiones a reporteros gráficos durante un desalojo de manifestantes del Texcal. Amenazas de muerte al compañero Goevanni Barrios por investigar actos de corrupción. Y claros ejemplos, muy claros, de intentar callar a voces críticas”.
Lo más reciente y preocupante, “… mujeres periodistas de la zona sur de Morelos, fueron amenazadas de muerte por la cobertura que hacen del conflicto social, político y de organizaciones delictivas que vive el municipio de Amacuzac”, subrayó.
También denunció: «Amacuzac vive una crisis donde el edil Noé Reynoso del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), y el legislador de ese distrito, Alfonso Miranda, del Partido del Trabajo (PT), se acusan mutuamente de corrupción y de vínculos con el crimen organizado.»
Detalló, que las amenazas contra las periodistas han escalado. “Las primeras ocurrieron hace tres años cuando el actual diputado, era alcalde de Amacuzac. Hace unas semanas, ante el recrudecimiento del conflicto, comenzaron las llamadas telefónicas para amedrentarlas e inhibir su libre ejercicio. Hace un par de días llegaron al grado máximo, públicamente fueron amenazadas de muerte por personas identificadas con los actores políticos en conflicto”.
#PrensaNoDisparen marchó en 20 ciudades, en toda la república mexicana
Exigencias
Porque no queremos enterrar más Gregorios, más Reginas, más Armandos.
Porque amamos la vida y nos queremos vivos y libres, y porque defendemos la democracia, por ello, hoy exigimos:
1) Que el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, garantice las condiciones para el ejercicio de la libre expresión en México, y que instrumente una estrategia especial para proteger la integridad física de los trabajadores de los medios de comunicación en todo el país, empezando por Veracruz.
2) A la Procuraduría General de la República, a través de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos en contra de la Libertad de Expresión (FEADLE), que amplíe y profundice las investigaciones relacionadas con el asesinato de Gregorio Jiménez de la Cruz, y que solicite la incompetencia del juez para que el caso sea asumido por un juez federal.
3) Al gobierno de Veracruz le exigimos que:
3.1 Se garantice la seguridad de los periodistas que se han manifestado en solidaridad con Gregorio Jiménez.
3.2 Cesen las presiones a los medios de comunicación y no se utilicen los convenios publicitarios como elemento de censura ni para premiar coberturas favorables en la prensa estatal.
4) Al gobierno de Morelos
4.1 Demandamos al Poder Ejecutivo y a las partes en conflicto, al alcalde Noé Reynoso Nava y al diputado Alfonso Miranda Gallegos, que tomen las medidas necesarias y posibles para frenar las amenazas contra reporteros y reporteras de la zona sur.
Hay que recalcar que ellas no han sido, ni son parte del conflicto, únicamente cumplen con el deber de informar a la sociedad qué es lo que pasa en sus comunidades. No queremos de ninguna manera que esta región se convierta en una zona de silencio a base de amenazas y de poner en riesgo la vida de quienes realizan una labor informativa.
4.2 Solicitamos al Mecanismo de Protección a Periodistas del Estado de Morelos, intervenir de oficio y otorgar medidas cautelares a favor de las reporteras en riesgo de ser atacadas.
4.3 Pedimos a los legisladores locales crear leyes efectivas que protejan el libre ejercicio profesional de manera integral a través de audiencias legislativas donde participe el gremio periodístico de todo el estado y que el mecanismo local que existe en Morelos sea integrado, pero mientras esto ocurre, juzgamos necesario que el mecanismo existente tenga un reglamento.
4. 4 Pedimos la intervención la Comisión Estatal de Derechos Humanos o de ser necesario la Nacional.
4.5. Existe un mecanismo local, consideramos necesario elevarlo a nivel de ley con las modificaciones obligadas para su perfeccionamiento.
5) A los ciudadanos les decimos:
Nuestra vocación es informar. No nos interesa ser protagonistas de la noticia. Sin embargo no dudaremos en salir a las calles cada vez que se agreda a nuestros compañeros. Estamos aquí para defender nuestra integridad, pero sobre todo para exigir que se respete el derecho de todos los ciudadanos a estar informados.
El peligro está a la vista: los corruptos, los criminales, los cómplices del terror celebran con cada periodista asesinado, con cada voz silenciada en impunidad.
Si callamos los periodistas, no habrá nadie que documente la corrupción y los delitos de los poderosos. Sin el derecho a la información no construiremos una verdadera democracia.
Que lo entiendan de una vez todos aquellos que esperan nuestro silencio: NO NOS VAMOS A CALLAR. Seguiremos siendo los ojos, los oídos, la conciencia crítica de este país ensangrentado. Con esa determinación daremos seguimiento puntual a nuestras demandas y denunciaremos a las autoridades que no sean capaces de llevar a cabo su encomienda.
Queremos respeto. NO queremos tener que volver a gritar ¡PRENSA, NO DISPAREN!
