Por Eugénie Moreau y Heriberto Paredes
Desde hace siete años, muchos especialistas de escritorio, en su mayoría, aseguran Brad Will se arriesgó demasiado, que cometió los peores errores y que eso provocó que las balas lo mataran. Como si no se tuviera que cuestionar el origen de las mismas, la razón por la que Oaxaca tuvo que vivir y sufrir la represión, los motivos por los que la insurreción popular creció. ¿Cómo es posible que la memoria de un compañero como él no sirva para profundizar en las causas? ¿Por qué se le permite a los analistas momificados esta gran ofensa? Con rabia e indignación, podemos ver la secuencia de su último día de vida y con este video comprobar que él estaba realizando una labor fundamental para la APPO: registrar los pasos del movimiento y con ello asegurar la conciencia histórica de él.
Casi nada se menciona de la importancia de su trabajo en el ámbito de la comunicación, tanto en México como en otros países. Su foto más conocida lo muestra mirando a la cámara, sentado en una barricada en la noche rebelde oaxaqueña. Siempre ahí, generando espacios para que las voces no fueran acalladas, para que las personas que vivieron esta experiencia organizativa y de lucha pudieran expresarse. Su labor hizo un llamado a voltear hacia la situación mediatica. Inspiró a mucha gente, no lo hizo sólo sino colaborando.
Ojalá que quienes señalan sólo los errores que le costaron la vida tuvieran la entereza, ética, entrega y pasión que tuvo él. Porque si algo está en jaque en México es la actividad periodística comprometida. Y esta discusión no es menor ahora que las cosas se están agravando cada vez más y que este país resulta de los más peligrosos para realizar labores de información o documentación.
Los hechos, tal como los relata Braulio Hidalgo y Costilla, son:
«Bradley Roland Will, periodista y documentalista independiente, fue asesinado hace 7 años un 27 de octubre; justo mientras le daba seguimiento y cobertura a los enfrentamientos ejecutados y financiados por el exgobernador Ulises Ruíz Ortíz. Esa tarde, salió con su cámara en mano y su moto, para dirigirse con integrantes de la APPO, a cubrir el sabotaje que intentaron hacerle a radio UABJO; eso como a las 10 am; de ahí se dirigió a Calicante, una de las barricadas que había sido amedrentada y rafageada por grupos paramilitares financiados por el PRI; los vecinos constataron los hechos como lo muestran las notas y videos del día en aquel 27 de octubre del 2006.
A la llegada de miles de personas a la comunidad de Calicante, municipio de Santa Lucía del Camino, los ánimos se complicaron. Alrededor de 40 personas armadas, con calibres cortos y largos, disparaban a quien se moviera. Hay unos que dicen que fueron horas de tensión y balacera.
El portal de Huffington post, en un artículo de investigación, fechado el 29 de mayo del 2012, explica que esa tarde trágica, fueron claramente identificados los agresores, arropados en el cuerpo paramilitar PRIista; de hecho Brad Will, filmó con claridad a los agresores. Dos de los agresores, que se muestran en los videos que grabó el propio Brad, fueron detenidos horas después de su asesinato, y liberados en el transcurso de esa semana. Sus nombres son Abel Zárate conocido como “El Chapulín ” y Manuel Aguilar Coello “El Comandante; al igual que un tercero de nombre Pedro Carmona».
Se señala al periodista en lugar de a los paramilitares que disparan o los políticos que nos mandan silenciar. Se califica al comunicador de «irresponsable» por arriesgar la vida de manera comprometida y necesaria. Los nombres de los asesinos a sueldo existen y nada se hace –por Brad ni por nadie.
En el 2006, Oaxaca fue escenario de un levantamiento popular histórico ahora conocido por algúnas personas como la ‘Comuna de Oaxaca’. Con la famosa Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), el pueblo oaxaqueño –movilizado desde la primavera en apoyo al magisterio– había armado un movimiento amplio y fuerte que no solo pedía la destitución del gobernador priísta, Ulises Ruíz Ortíz, sino que había logrado cuestionar el modelo mismo de gobierno.
Este domingo 27 de octubre de 2013, lxs oaxaqueñxs se movilizaron para conmemorar la muerte de Brad Will, y también para recordar que siguen en pie de lucha para exigir justicia por todxs los crímenes cometidos; y seguir defendiendo sus derechos como pueblo frente a las políticas neoliberales que intentan imponer sus dirigentes. Como nos dijo una de las múltiples mujeres que participaron activamente del movimiento:
“No van a callar la voz de los pueblos con armas, con bayonetas, porque hay una memoria histórica, Oaxaca después del 2006 es otro”
En este marco, tampoco olvidaron subrayar el papel central que tomaron y siguen tomando los medios de comunicación en su resistencia, saludando y demostrando su apoyo al trabajo de los medios independientes: “Para nosotros el papel que juegan los medios libres, son sumamente importantes. Son en los medios libres en quienes podemos confiar, porque son los únicos que hasta el momento nos han mostrado que llevan una verdad hacia el pueblo”, nos explicó así una maestra presente en la marcha. Y el ejemplo de Brad continúa.
Referencias:
Braulio Hidalgo y Costilla (25 de octubre de 2013). «México, Brad Will. 7 años de su asesinato y la herida no cierra». La Guarura, Sistema comunicacional libre y militante.
Bradley Roland Will [póstumo], Mal de Ojo e Indymedia (27 de octubre de 2006). «Brad Will, Indymedia journalist killed in Oaxaca» Canal de Paper City Films en Youtube.