Texto: Mumia Abu-Jamal
Photo: Twitter user @The_Blackness48
Una vez más un joven negro desarmado ha sido asesinado por un policía.
Aunque los hechos del ataque aún no se aclaran, lo que sí está claro es que un policía le disparó al joven Michael Brown ocho veces.
Según un testigo presencial, a Brown le dispararon con las manos arriba.
Para quien conozca la historia de Estados Unidos, esto no es nada raro.
Es el resultado de la función sistemática de la policía a lo largo del país, de reprimir, monitorear y acosar a la población negra de la nación.
Esto ha sido el caso durante generaciones.
Veremos ciertos voceros designados para llamar a la tranquilidad, mientras la furia surge en los corazones de los negros sobre este escandaloso trato dado al joven. Los que llaman a la tranquilidad nunca llaman a una verdadera justicia porque ésta implica la igualdad, y ¿quién se atreve a exigir que los policías sean tratados igual que la gente a la que oprimen?
Estos voceros no tienen ninguna influencia sobre las fuerzas represivas, de hecho, ningún político en el país la tiene, porque todos han sido comprados o vendidos.
Escuchen a las voces de los políticos «negros».
Escuchen a las voces de los políticos blancos.
Escuchen a su silencio feroz.
Lo que hace falta en los suburbios de St. Louis, Missouri –y en cada comunidad negra en Estados Unidos– son colectivos negros que sean independientes, resueltos y revolucionarios. Colectivos decididos a proteger la vida y bienestar de la gente negra, y punto.
Las existentes estructuras políticas –calladas ante atrocidades como ésta– nos han fallado y no se pueden modificar para servir a nuestros intereses.
Ya es hora de aprender de esta situación y construir algo para resolver nuestras necesidades actuales y futuras.
Desde la nación encarcelada, soy Mumia Abu-Jamal.
–©’14maj
11 de agosto de 2014
Audio grabado por Noelle Hanrahan: www.prisonradio.org
Texto circulado por Fatirah Litestar01@aol.com
Traducción Amig@s de Mumia, México