Por Alma Sánchez
“La tierra es un derecho, no es una mercancía. La empresa apela que es de su propiedad. Y nosotros estamos aquí para decirles que la tierra en Tepoztlán es comunal. Son tierras que son parte de un corredor biológico (área natural protegida) y de un parque nacional. Generan oxígeno, capturan agua, son el hábitat de un muchas especies, de animales, de plantas, en algunos casos endémicas.”
Roberto Robles, tepozteco.
El día miércoles 26 de septiembre, jóvenes, comuneros y mujeres tepoztecas con un papel sumamente importante en la lucha contra el Club de Golf, en los años 90, viajaron rumbo a la ciudad de México para reiterar nuevamente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y a la inmobiliaria Pirámide y Convento S.A. de C.V., que sus tierras comunales nunca estuvieron en venta y no lo estarán.
Al llegar a este organismo, hubo un momento en cuál se impedía el acceso a la audiencia a una representación de comuneros que están registrados en el padrón. Al final sólo dieron acceso a tres de ellos.
Saturnino Medina, comunero reconocido, explica a Subversiones parte del proceso que acredita estar en el padrón de comuneros y dice que las actas de asamblea cuando son convocadas deja claridad de quienes están legalmente reconocidos y la empresa en este caso, no cuenta con la documentación que los acredite ante el Registro Agrario Nacional, esto significa que no están en el padrón ya que no están reconocidos por el núcleo agrario de Tepoztlán, y todo lo que esta haciendo la inmobiliaria es ilegal.
Por otro lado expresa: “Se le pide al ministro que cumpla con su trabajo siempre apegándose a derecho. Ya que ellos manifiestan que tienen documentos ante del Registro Público de la Propiedad, pero en ningún momento se ha llevado a cabo una segregación de las 23,800 hectáreas que tiene Tepoztlán para separar 280, las del conflicto de Montecastillo, y que no le pertenecen a la inmobiliaria”.
Afirma que Tepoztlán tiene otras prioridades más que un club de golf que atenta contra la vida en su territorio y señala que los tribunales llevaron juicios, en especial el 190/99, donde se pide la anulación de documentos ya que la ley agraria manifiesta que la tierra comunal es inembargable, imprescriptible e inalienable. Por último nos dice que para el caso de Tepoztlán hay títulos de 1548 ratificados por el virreinato y que indican que no hay pequeña propiedad.
Mientras la representación de Tepoztlán espera afuera, se muestran pancartas en donde de lee: “Bosques y agua, ¡SI! Club de Golf, ¡NO!” entre otras. Además de escucharse música sobre la danza del Chinelo que es representativa del Estado de Morelos y que parodia los excesos de los poderosos ya que a los indígenas del pueblo se les impedía participar en las fiestas del carnaval.
Al término de aproximadamente dos horas, salen los comuneros y explican a la comunidad que dieron pase de lista de los casos del ministro Eduardo Medina Mora de la segunda sala de la SCJN y que se pospone por tercera vez el juicio de amparo 40/2017 sobre la sentencia de 280 hectáreas de tierras comunales. Se pospuso la sesión para el miércoles 3 de octubre al medio día.