Ostula se moviliza en memoria de Reginaldo Rodríguez Flores

Por Terracería Audiovisual

 

El pasado 25 de Mayo, la comunidad de Santa María Ostula llevó a cabo un acto cívico en honor a la memoria de quien fuera comandante de la Policía Comunitaria de esta encargatura, Reginaldo Rodríguez Flores, asesinado durante un enfrentamiento que tuvo lugar el año pasado entre policías comunitarios y sicarios de Los Caballeros Templarios en las inmediaciones de la localidad «Ojo de Agua».

Dicho enfrentamiento se llevó a cabo como consecuencia de la emboscada que horas antes habían perpetrado los pistoleros en contra de Cemeí Verdía quien resulto ileso, no así su escolta quien recibió algunos impactos de bala en el brazo. El atentado provocó la movilización de policías comunitarios y miembros de la Fuerza Rural quienes sostuvieron un enfrentamiento durante mas de 24 horas con los agresores. Durante la balacera también resultó muerto Miguel Sandoval, comandante de la policía comunitaria de la cabecera municipal de Aquila y al menos 3 policías mas resultaron heridos. Los 6 atacantes perdieron la vida.

Durante el acto cívico estuvieron presentes comandantes y policías comunitarios del municipio de Coahuayana y Aquila para recordar a quien fuera su compañero.

La comunidad dio a conocer una proclama en la cual fijaron su postura ante la situación que se vive actualmente en la región y en el país, reafirmando su voluntad para seguir luchando por justicia y paz para la comunidad:

Con la memoria a flor de piel, y los corazones llenos de rabia, pero también con la esperanza que Ostula nos enseña que otro mundo es posible cuando se construye con tanto amor a la vida que se esta dispuesto a dar la propia para defender la vida colectiva, hoy exigimos alto a la guerra, justicia para le pueblo de Ostula. […]

Nosotros con rabia y dolor, hoy recordamos a don Reginaldo Rodríguez Flores, compañero desde los tiempos más obscuros y peligrosos de esta histórica y heroica lucha en la que hoy tiene un lugar de honor. Lo recordamos en medio de la guerra que no para y que pese a las medidas cautelares dictadas a favor de la comunidad por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en septiembre de 2010, sigue cobrando víctimas en los que la impunidad es la constante.