Posicionamiento sobre legislación secundaria de la Ley de Telecomunicaciones

Fotografías por Kinoluiggi

 

La iniciativa de Ley sobre Telecomunicaciones y Radiodifusión que Enrique Peña Nieto entregó al Senado se encuentra de mano en mano para su cabildeo en este momento. Será a caso modificada, votada en comisiones y llevada al pleno para su aprobación, a partir del lunes 21 de abril. De ser aprobadas, estas modificaciones legislativas resultarán un nuevo retroceso en materia de derechos para los mexicanos, como por ejemplo, en el hecho de otorgar a la Secretaría de Gobernación la facultad para vigilar, valorar y eventualmente ordenar a las empresas bloquear las señales de telecomunicaciones.

La propuesta del Ejecutivo federal en materia de telecomunicaciones y radiodifusión debe entenderse en su contexto y no de forma aislada: obedece a un agresivo paquete de reformas estructurales, que limitan las libertades democráticas en nuestro país, tal y como sucedió con la Reforma Educativa, cuando al aprobarse las leyes secundarias, se consumó una etapa más en el camino para desmantelar las conquistas sociales de todo el gremio magisterial. Ahora toca el turno a los derechos de informar e informarse, de la libre expresión de las ideas y de la comunicación, para ser coartados y restringidos a un rango que podemos señalar, mínimamente, como autoritario y punitivo.

Dada esta situación, los abajo firmantes emitimos este documento para dar a conocer nuestra postura al respecto.

Posicionamiento

El Congreso de la Unión se encuentra próximo a “discutir” y aprobar la iniciativa de legislación secundaria de la Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión. El contenido de dicha iniciativa, enviada por el Ejecutivo federal, representa un golpe más contra las libertades democráticas en nuestro país, al mismo tiempo que evidencia el nulo interés por democratizar los medios de comunicación.

En voz de diferentes expertos en la materia, la iniciativa representa un retroceso. Abre la posibilidad a la censura en internet, pues otorga a la Secretaría de Gobernación la facultad para vigilar, valorar y eventualmente ordenar a las empresas bloquear las señales de telecomunicaciones. Vale destacar que la medida no establece controles judiciales al respecto, es decir, se puede monitorear, vigilar y bloquear cuando el Ejecutivo federal así lo decida.

De aprobarse en su redacción original, la iniciativa daría recursos legales al Estado mexicano para la obtención de datos personales mediante localización geográfica en tiempo real. En conjunto, se atentaría de forma grave contra los derechos humanos y la libertad de expresión, al mismo tiempo que se limitaría la labor de periodistas y defensores de derechos humanos, sobre todo en contextos de protesta social.

La iniciativa de legislación secundaria de la Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión significa un paso más, y quizá el más evidente, del intento de este gobierno priísta por ampliar y sofisticar sus mecanismos de control, al mismo tiempo que refuerza su alianza con el duopolio televisivo.

La propuesta del Ejecutivo federal en materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión debe entenderse en su contexto y no de forma aislada: obedece a un agresivo paquete de reformas estructurales con las se entregan los bienes de la Nación al sector  privado (Reforma Energética), y se vulneran los derechos de millones de trabajadores (Reformas Laboral y Educativa). Obedece también a una reconfiguración del Estado mexicano en un Estado autoritario, el cual suprime libertades democráticas al tiempo que criminaliza la protesta social, persigue a sus críticos y propicia un clima hostil y de inseguridad contra defensores de derechos humanos, periodistas y activistas sociales que lo denuncian.

Hoy no sólo está en disputa la Nación, sino la posibilidad de informar verazmente, de ofrecer contenidos diferentes, de denunciar los excesos de poder y de contribuir a la formación de la opinión pública. Está en juego también la posibilidad de sentar las bases, para la democratización de los medios de comunicación y para ponerle fin a la concentración económica de las telecomunicaciones.

Por tal motivo, llamamos a la sociedad mexicana a mantenerse informada y al pendiente del rumbo que tomen estas discusiones. Nuestra participación es de vital importancia para impedir que continúen reduciendo nuestras libertades democráticas.

Atentamente:

  1. Miguel Concha Malo
  2. Gilberto López y Rivas
  3. Martín Esparza (Secretario General del SME)
  4. Paula Santoyo Rosas
  5. Carlos A. Ventura Callejas
  6. Mario Saucedo Pérez
  7. José Humberto Montes de Oca (Secretario del Exterior del SME)
  8. Pilar Puertas
  9. Víctor García Zapata (Fundación para la Democracia)
  10. Manuel Canto Chac
  11. Sofía Angélica Silva
  12. Alberto Arroyo Picard
  13. Camilo Valenzuela
  14. Neftalí Granados
  15. Mónica Soto Elízaga
  16. Raúl Romero Gallardo
  17. Mireille Campos Arzeta
  18. Celso Alvarado
  19. Miguel Ramírez Quintana
  20. Ángel Peralta
  21. Armando Osorio Chulín
  22. Guadalupe Coutiño
  23. Javier Lara
  24. Jócelyn R. Hernández Fernández
  25. Juan Francisco García Reynoso
  26. Wendy de la Rosa
  27. Luis Gómez
  28. Ivonne G. Villalón
  29. Érika Lozano
  30. María Isabel Rodríguez F.
  31. Montserrat Castillo
  32. Karla Lidia Díaz
  33. Agencia Autónoma de Comunicación Subversiones
  34. Coordinadora 1º de diciembre
  35. Movimiento de Liberación Nacional
  36. #YoSoy132 Chicago
  37. Fundación para la Democracia
  38. Mario Vladimir Monroy Gómez
  39. Mujeres por México en Chihuahua A.C.
  40. Centro de Pastoral Obrera de Cd. Juárez, A.C.