LUCHA es nombre de mujer

Por Itzayana Tarelo

Señoritas, señoritas.
Recuerden que las piernas solo se abren cuando se quieren abrir
y la cabeza tiene que estar abierta siempre; contra el Estado,
el capital y el patriarcado.

El ocho de marzo, reconocido a nivel mundial como el Día de la mujer trabajadora, conmemora a las 146 mujeres que murieron quemadas en la fábrica textil Cotton en Nueva York, en 1908, cuando luchaban por mejorar las condiciones laborales en que se encontraban. Es ahora una fecha para profundizar la reflexión y cuestionamiento a la situación actual de las mujeres en el ámbito público y privado, así como para recordar que aún falta mucho por construir, entre todas y todos, para eliminar todo tipo de violencia y discriminación hacia la mujer.

Bajo este contexto, el pasado ocho de marzo, en la capital de Querétaro, un gran número de personas se reunieron en el jardín Corregidora para realizar «La marcha de las putas», que fue acompañada por la escritora feminista Francesca Gargallo.

De acuerdo a información difundida por la Red de Mujeres Feministas durante «La marcha de las putas», en México se cometieron 36,600 feminicidios entre el año 1985 y 2010. Y cada día se cometen en el país 6.5 feminicidios, de los cuales 5.3% son niñas. Para el caso del estado de Querétaro “se reportaron 207 violaciones sexuales entre enero y octubre del 2013; por cada violación sexual, hay 8 que no se denuncian”.

Este tipo de manifestación se ha realizado previamente en México y otras partes del mundo. Las personas que protestan hacen uso y reivindicación de la palabra “puta” por tratarse de un término que se ha empleado para señalar y castigar a las mujeres que deciden libremente sobre su sexualidad y sus cuerpos. Algunas de las finalidades son: visibilizar la violencia y el acoso hacia las mujeres en las calles, dejar en claro que la violencia sexual nunca es culpa de la víctima y defender el derecho a decir no.