Chiapas y Morelos se unen a la conmemoración del 2 de octubre

San Cristobal de las Casas Chiapas. Estudiantes de Chiapas recuerdan, 47 años de la matanza de Tlatelolco.

*Así fue la matanza de Tlatelolco en 1968 *

Todavía fresca la herida, todavía bajo la impresión del mazazo en la cabeza, los mexicanos se interrogan atónitos. La sangre pisoteada de cientos de estudiantes, hombres, mujeres, niños, soldados y ancianos se ha secado en la tierra de Tlatelolco. Por ahora la sangre ha vuelto al lugar de su quietud. Más tarde brotarán las flores entre las ruinas y entre los sepulcros.

Fotografías de  Guerrilla Audiovisual–Perú

2 de octubre de 2015, Cuernavaca, Morelos

Estudiantes (en su mayoría de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos [UAEM])–, trabajadores/as y defensores/as de derechos humanos, marcharon de la «glorieta de Zapata» al zócalo de la ciudad por el 47 aniversario de la masacre de estudiantes en Tlatelolco, Ciudad de México, en 1968. A pesar de ser un contingente compacto de jóvenes, trabajadores (del SME-Cuernavaca y la Comisión Independiente de Derechos Humanos de Morelos) y simpatizantes, estos realizaron el recorrido con mucho ímpetu, coreando enérgicas consignas populares y críticas, y llamando, cada tanto, a la gente a sumarse a la manifestación. Al paso de la marcha, un grupo de jóvenes con el rostro cubierto realizó pintas en edificios públicos, bancos, algunas bardas de inmuebles de marcas transnacionales y en la 24ª zona militar que quedaba en la ruta. No hubo mayor incomodidad al interior ni al exterior de la marcha con la acción que llevó a cabo este grupo; claro que tampoco había policías a granel, a excepción de los policías de tránsito en motocicleta que cerraron las calles mientras la manifestación pasó. Algunos conductores tocaban el claxon en señal de apoyo, uno o dos «mentando madres». La consigna principal tal como en el resto del país fue –y es– la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos por el Estado hace un año; el recordatorio central: «No olvidamos». Al paso de la marcha se fueron sumando personas que interceptaron el contingente. Ya cerca del centro también se sumaron otros contingentes de trabajadores del Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM) –la universidad nacional tiene institutos de ciencias en la ciudad–, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) de Morelos, y el Sindicato de Trabajadores del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (SIT-IMTA). En el zócalo se realizó un pequeño mitin y un programa cultural. Las comparaciones entre 1968 y la actualidad en cuanto a niveles de represión e impunidad fueron otra nota tónica. A decir de una asistente, un mensaje propicio para el momento sería que «la memoria precisa de ser nutrida con más curiosidad, creatividad y fuerza para lograr evitar que la historia se siga repitiendo, para alumbrar los tiempos oscuros que vivimos y poder actuar cada vez con mayor claridad y consciencia ».

Fotos: Héctor Gaitán y María González