De la meseta p’urhépecha a la costa michoacana: un panorama preelectoral

El tiempo se agota, las campañas electorales se cierran, Chiapas quema, Oaxaca quema, Guerrero quema y Michoacán, considerado otro foco rojo para estas elecciones 2015, sigue apagado. O casi. En un estado donde los ciudadanos tendrían miles de razones para rebelarse contra la pantomima electoral y sus protagonistas, hasta la fecha se han registrado sólo la tímida detención de un camión cargado de despensas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) –ocurrido en Morelia por parte de integrantes del equipo de campaña del Partido del Trabajo (PT)– y las amenazas de boicot de la sección 18, brazo michoacano de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).

Cabe recordar que luego del levantamiento de las autodefensas en el febrero de 2013, la estructura política del estado empezó a derrumbarse, poco a poco pero inexorablemente, en un proceso de remoción de personajes que, frente a las denuncias de los comunitarios y bajo la mirada del mundo, tenían que desaparecer de la escena; si no por rectitud al menos por decencia. En esta supuesta limpia, anunciada por el ex-comisionado Alfredo Castillo en el mes de abril de 2014, cayeron muchos de los que no tuvieron la posibilidad –o la rapidez– de dejar su cargo, como Guillermo Valencia Reyes, alcalde de Tepalcatepec, que «cuando fueron por él ya no estaba» o como Luis Torres Chávez, de Buena Vista Tomatlán, quien desapareció el mero día de la insurrección armada para luego reaparecer en Morelia, de donde pidió licencia. Así, el desmantelamiento del cártel de los Caballeros Templarios se llevó también a Uriel Chávez Mendoza, alcalde de Apatzingán; Noé Octavo Aburto Inclán de Tacámbaro; Jesús Cruz Valencia de Aguililla; Simón Vicente Pacheco de Charapan; José Luis Madrigal Figueroa de Numarán; Salma Karrum Cervantes de Pátzcuaro y Dalia Santana Pineda de Huetamo. Esto, sin mencionar a los altos cargos, como el secretario general de gobierno del estado Jesús Reyna, detenido el 4 de abril con la acusación de proteger a los integrantes del cártel, o como el ex-gobernador del estado Fausto Vallejo, que el 19 de junio pidió licencia definitiva, después de un empeoramiento de sus condiciones de salud, a lo que probablemente contribuyó la publicación en las redes sociales de un video en que su hijo Rodrigo aparecía con Servando Gómez Martínez, alias La Tuta, ex-líder templario.

Sin embargo, a pesar de todas las detenciones de funcionarios públicos, sin distinción de cargo, color o partido, la batalla para el control de una de las entidades federativas más ricas y estratégicas del país será, una vez más, política. Los michoacanos parecen creer que algo bueno pueda salir de esta nueva tornada electoral, pero ¿es realmente así? ¿Realmente el levantamiento de las autodefensas creó las condiciones para que la población tenga confianza en los candidatos y exprese su preferencia sin miedo?

Instituto Electoral de Michoacán. Por Rodrigo Caballero.

Instituto Electoral de Michoacán. Por Rodrigo Caballero.

Este viernes 5 de junio se cumplieron siete días de «caminos de Michoacán», siete días en que recorrimos la Meseta Purépecha, pasamos por Tierra Caliente, fuimos a Aquila, visitamos Ostula, y regresamos atravesando la Sierra. Con el objetivo de tener un cuadro más completo posible de la situación que se vive en estos últimos días preelectorales, en las regiones del estado que pudimos alcanzar hemos estado platicando con la gente, entrevistando a los comunitarios que se dejaron acercar, escuchando unos cierres de campañas que nos atravesaron el camino y recolectando rumores, concientes que en estas tierras las noticias están más sentadas en los banquitos de las plazas municipales que impresas en las páginas de los periódicos. El resultado no ha sido, hasta la fecha, lo que nos hubiera gustado, y no porque seamos partidarios de alguna facción sino porque lo que esperábamos para los michoacanos era que su decisión de ir a las urnas fuera libre, sin influencias externas, mientras resulta que en muchos lugares su voto será fruto, una vez más, sino de abiertas amenazas por lo menos de «sutiles sugerencias».

Cabe recordar que la desigualdad social es una plaga endémica en el estado y es muy común que enteras comunidades o tenencias dependan completamente del trabajo jornalero que les proporcionan una o más empresas, sean de aguacates, limones, zarzamoras, madera o de alguna otra «materia prima» entre las muchas que son parte de la riqueza de Michoacán. Esta condición aporta un enorme poder a los propietarios o accionistas de dichas empresas, que muy fácilmente se vuelven gremios de votos al servicio del político que más favorece su desarrollo y posicionamiento en el mercado.

Es el caso de las Comunidades Unidas, formadas por las tenencias de Cherato, Cheratillo, 18 de Marzo y Orúzcato, pertenecientes al municipio de Los Reyes, donde el pueblo ya varias veces declaró no querer un sistema partidario sino unas elecciones por usos y costumbres, un deseo institucionalizado a la mitad de mayo a través de un comunicado, cuyo resultado se desconoce hasta la fecha. Los comuneros no denunciaron abiertamente a ninguna empresa, pero nos confirmaron que, desde el bloqueo del 14 de mayo, cuando cerraron la carretera Peribán-Los Reyes exigiendo el regreso del joven Miguel Vidales, supuestamente levantado por elementos de la Fuerza Rural, la presión para que dejaran instalar las casillas electorales nunca ha dejado de subir. Cabe recordar que en esta tierra los que se levantaron en armas en 2013 nunca se definieron autodefensas, más bien retomaron la prehispánica figura de la Guardia Comunitaria, institución respaldada por la comunidad y encargada de su defensa.

Ahora, para que los ciudadanos acepten el «contrato electoral», piden que el Estado resuelva el problema de seguridad que él mismo creó con la formación de los cuerpos policiales de Alfredo Castillo y que, en el municipio de Los Reyes, impuso elementos foráneos de dudosa procedencia e intenciones. Las desapariciones de hecho no han parado, y los comunitarios denuncian que los responsables son los mismos Rurales que, cabe destacar, se adjudicaron entre mayo de 2014 y febrero de 2015 al menos 128 de las 533 quejas en contra de la Secretaria de Seguridad Pública de Michoacán recibidas por la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH). Hasta hoy, el Instituto Nacional Electoral (INE) sigue confirmando que la cabecera municipal de Cherán será la única que no permitirá la instalación de las casillas electorales el próximo domingo, seguimos al pendiente de la Comunidades Unidas.

La Meseta no es el único lugar de la entidad federativa donde la población sigue denunciando la ineficiencia del Estado y la persistencia de células de los Templarios. El pasado 25 de mayo, Semeí Verdía, líder de la comunidad nahua de Ostula, municipio de Aquila, se libró milagrosamente de un tercer atentado que originó un enfrentamiento de tres días entre comunitarios y ex-integrantes del cártel. Verdía es el último comandante de las autodefensas legítimas que queda vivo y en libertad, después del asesinato del líder de Yurécuaro Enrique Hernández Salcedo, candidato por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ocurrido el pasado 14 de mayo.

En nuestra visita a la región de la costa nos detuvimos en Aquila, donde el clima se reveló todavía muy tenso y algunos comuneros denunciaron el intento de provocar un enfrentamiento en la comunidad por parte de supuestos acarreados del PRI quienes, desde el pasado 15 de abril, están bloqueando el acceso a la mina. Desde hace casi dos meses, de hecho, poco más de cien personas, entre las cuales los entrevistados identificaron muchos foráneos, han obligado a la minera Ternium a declarar el paro temporal de las actividades, generando problemas relacionados con el cese del ingreso que la comunidad cobra a la compañía, cuya erogación va de la mano con la extracción del hierro y que monta a 3.8 dólares por tonelada. Para entender el volumen del negocio es suficiente pensar que la empresa Ternium-Las Encinas S.A. es la segunda en importancia a nivel estatal y su extracción se acerca a las 1000 toneladas de hierro al día.

Los manifestantes exponían mantas a la entrada de la mina revindicando la propiedad indígena de los terrenos explotados y pidiendo que se acabara con el despojo de los bienes de los pueblos originarios. Sin embargo, no quisieron declarar las razones de su lucha en ausencia de sus líderes y no permitieron fotografías. Los comuneros que señalaron este bloqueo como un intento de provocar un conflicto en el pueblo, denunciaron que el objetivo sería llamar la atención de la policía federal o del ejército que tendrían, de esta manera, una excusa para desarmar a los comunitarios del municipio, en un contexto de disputa electoral ya muy difícil de por sí.

Y como si la situación no fuera suficientemente compleja, el 31 de mayo elementos de la Fuerza Rural detuvieron al alcalde de Aquila, Juan Hernández Ramírez, por vínculos con los Templarios e implicaciones en el atentado a Semeí Verdía mencionado anteriormente. Con respecto a estos acontecimientos, fueron varias las versiones y los detalles que escuchamos en estos últimos días, sin poder reconstruir realmente lo sucedido. Lo único que podemos afirmar con certeza es que este enésimo intento de matar al comandante nahua no es sólo un atentado directo contra su persona sino hacia la entera comunidad de Ostula, a su camino hacia la autonomía, a la defensa y recuperación de su territorio, a su proceso de retorno a los usos y costumbres y, sobretodo, a su firmeza en rechazar las concesiones mineras.

Minas, minas y otra vez minas. Dejamos la Costa, subimos nuevamente a la Sierra pero el discurso no cambia. El miércoles pasado, de hecho, en la plaza municipal de Coalcomán de Vázquez Pallares, asistimos al cierre de campaña de Misael González, líder de las autodefensas ahora Rurales, y candidato por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la «tierra de bellas mujeres y hombres ilustres». En medio de una pseudo fiesta con un hombre con zancos y cerveza, Misael hizo un llamado a todos los empresarios del municipio para que no se olviden de la riqueza minera de Coalcomán: un negocio que los mismos propietarios de estas ricas tierras no han podido explotar todavía, debido al sistema de cuotas de los Templarios y a la imposición de su presencia mortífera en cualquier actividad productiva de la zona. Junto con la madera, de hecho, la abundancia de hierro en el subsuelo es la otra grande fuente de ingreso de que los coalcomanenses quieren reapropiarse. Habría sido interesante conocer la opinión de los habitantes de las comunidades más lejanas de la cabecera, como Guadalupe del Cobre o La Minita, que el año pasado nos comentaban cómo fueron afectados por los desechos de las minas que contaminaron sus campos y ríos. Pero era un cierre de campaña, y no un debate, así que ellos no fueron «invitados».

Sin embargo, en estos días preelectorales, el problema de Coalcomán no es tanto el programa de gobierno de los varios candidatos, sino la oposición que al parecer se ha dado desde el mayo del año pasado entre el grupo de Rurales fieles a González y los demás autodefensas, muchos de los cuales han quedado afuera de la lista entregada al ex-comisionado Castillo. Desde algunos días, dos retenes mixtos de autodefensas uniformados no han sido nuevamente instalados a las dos entradas de la cabecera. Nosotros hemos platicado con los que se encuentran en la carretera rumbo a la costa, y nos han confirmado que no se trata de un bloqueo sino de un puesto de revisión supuestamente pedido por la misma ciudadanía, para evitar que «personas desconocidas entren al pueblo en el delicado momento de las elecciones». Sin embargo, después de varias pláticas en la plaza municipal, nos hemos enterado que «hay mucha gente rara, que nunca se vio antes», así que nos quedamos con la pregunta de que en el puesto de revisión estén inspeccionando.

Los que en cambio sí fueron bloqueos y no retenes fueron los del miércoles 5 en la Tierra Caliente, donde elementos de la Fuerza Rural detuvieron el tránsito de la carretera Pátzcuaro-Uruapan, al igual que los entronques que conducen a Buenavista Tomatlán, Cuatro Caminos, Zamora, Los Reyes,  Peribán y la autopista Siglo XXI. La explicación fue la detención supuestamente injustificada de un grupo de Rurales por parte del Ejército Mexicano, en el municipio de Tangamandapio. Hasta la fecha no hemos podido recaudar más información sobre estas detenciones, pero era previsible que bloqueos de este tipo, en un día de cierre de campañas, habrían afectado por lo menos algunos de los candidatos de Tierra Caliente, como de hecho sucedió en Buenavista Tomatlán. A pesar de la sospecha que la finalidad pudiera no haber sido sólo la petición de la libertad de los compañeros, los bloqueos han sido retirados después de unas horas sin accidentes y ayer –viernes 5 de junio- las carreteras de la Sierra a Tierra Caliente estaban libres. Ojalá podamos usar el mismo adjetivo también para el voto del domingo.